La verdad es que no aprendo. Desde hace 2 años quiero unas cangrejeras, para combinar negros y marrones.
Yo esperaba a las rebajas, pues por la noche, el primer día de rebajas en la tienda on line de Zara, vi que las tenían, además mi número y genial de precio.
Total, le digo al Pichu toda contenta que voy a tener las cangrejeras, que luego las compraríamos desde su móvil porque tenía mejor conexión que yo, pero luego se me pasó el tema.
Al día siguiente se lo digo y él estaba asombrado por mi alucine por las cangrejeras, "qué estrambótica eres, de verdad, Pichu". Sonrió y dejó el tema. Tampoco me sorprendí de su reacción, yo uso turbantes... Jaja. Le seguía explicando que me valían para todo, que si quería con los pantalones, que si con los vestidos muy largos,... Él ponía cara de alucine y desconectaba (está claro, no dije la palabra clave mágica para captar la atención de un hombre: ¡tetas!).
Total, vamos a entrar con el móvil y ya no tienen mi númerooooooo, ni en negro, ni en marrón, ni ná de ná. ¡Qué sofocón y disgusto! Para una cosa que quiere una y por muy poco y no me puedo dar ni el capricho, parece que sólo me puedo comprar un pinta uñas.
Durante los siguientes días yo seguía bucando on line y, bueno, no las encontré. Pero llegó el Pichu y, por nuestro día del porque sí (ese en el que cada uno sorprende con algo al otro porque nos apetece), apareció con una caja. ¡Casi me muero! Las olía, las presentía. Aquí estaba mi hombre, mi macho, mi príncipe y genio que todo me lo concede como si yo fuera su Corina... (Esta serie/reality necesita una entrada a parte, puuffff, qué genios los del casting, es lo único que hemos visto en la tele este curso escolar).
Pero él sonreía, pero de una forma siniestra, era una sonrisa pícara que no denotaba nada bueno. Yo no me acordé de mis Louboutin, ni de mi loewe y como una gilipollas me emocioné, pero de dar saltitos de alegría y todo, ¡eh! Él sólo repetía una y otra vez: "Puñetero color, pichu, en serio, yo creía que sería más fácil ese color".
Abrí la cajaaaaa y...
¡¡¡Tachannnnnnnnnn!!!
Tierra trágame, bueno, mejor trágatelo a él y lo escupes por la Antípodas o por ahí.
Será...
Seré...
En fin, otro año será. Por cierto, si alguna se las compró y no le gustan o no acertaron con el número, yo calzo un 39, gracias. Jeje.
Él sigue emperrado y convencido que éstas son las auténticas cangrejeras, las de toda la vida. Y que en ciertos sitios como Xanxenso las denominan fanequeras.
Aaaaaaarrrrrrrggggggggggg, lo mato.
Besos.
POST EDITION DE ULTIMA HORA : Más monoooooooo !!!!! Qué alguien deje de comer por buscarte un capricho ,....es de ser muy PICHU
..... Un Po ¡¡¡¡