Yo por dinero ya he podido hacer cualquier cosa y cuando digo cualquier cosa, es cualquier cosa. Me explico que según lo releo suena muy mal, jeje.
Cuando decidí ejercer (jo, entre lo de ejercer y hacer cualquier cosa suena a que jodo por dinero, aunque en parte es así...) y hacer divorcios (sólo llevaba laboral) decidí que no haría divorcios con menores, sabía que iría a joder a la otra parte y no quería llevarlo sobre mi conciencia y saber que les quitaba algo a esos niños o los estaba perjudicando. Pero cuando aparecieron a mi lado niños, pensé que tenían que vivir mejor cuando estuvieran a mi lado, decidí que el padre o madre de la parte contraria que yo llevara en estos asuntos debería haberme contratado a mí o a un compañero que luchara por sus derechos y los de sus hijos, al menos un mínimo, como yo lo haría y así es cómo empecé a llevar divorcios con niños, lo hice para lograr lo mejor para ellos.
Ahora, cuando diseño una diadema y la hago para una niña, pienso en mis musas, en mis niñas, en esas gordas princesas mamonas llenas de gritos y alegría y cuando me las imagino de comunión lo hago pensando en una niña de comunión, ¡no una novia! Así que, si a tu hija la voy a hacer una diadema o un florero para la cabeza, por favor, no me mande una foto de un vestido de novia con una señora en ese vestido y no me diga que me imagine que es para una niña. Si es para una niña, ¿qué pinta una novia en todo esto?
Es que no puedo, de corazón que no puedo. Puedo hacerla sin saberlo, duermo mejor, no me siento culpable, pero necesito ser honesta, sé que es tirar piedras sobre mi propio tejado. Pero no quiero formar parte del desvarío social a sabiendas, de querer que una niña sea de repente una mujer. Una Comunión es un acto y una boda es otro muy distinto, con una protagonista muuyyy distinta.
Así que, la que quiera llevar en el pelo cosas de novias para sus hijas, perfecto, yo le hago eso o lo que quiera sin problema ninguno. Pero no me digáis que es para una niña, please! Ni cuando haga las Bailarinas...
Cuándo se me pasen estos prejuicios lo diré, cambiaré de opinión y justificaré ese cambio con alguna chorrada que me auto convenza. Pero, por favor, por favor, las niñas de Algodón de Luna van de comunión, como niñas, no como adultas, aunque les ponga una pluma, una lentejuela o una perla, mis nenas son nenas, ¡al menos por ahora!
Nuestras Niñas de comunión
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